Antes de iniciar un negocio, es básico contar con asesoramiento profesional, con el fin no sólo de garantizar el cumplimiento en cuanto a obligaciones tributarias o laborales y de cualquier otro ámbito jurídico. Es también fundamental tener la mejor información sobre como orientar la empresa, qué forma jurídica darle, como diseñar su administración y sus órganos rectores así como sus RRHH. De esta manera, adaptaremos la empresa a sus necesidades, su dimensión y su entorno al tiempo que evitaremos caer en el incumplimiento de disposiciones legales y tributarias, lo que puede dar lugar a sanciones o incluso el cierre de negocio. Por ello, la importancia de diseñar desde el principio la forma jurídica y la organización de la empresa, así como sus procedimientos y, de este modo, evitar un importante número de problemas, consiguiendo la optimización de los recursos disponibles.